La oclusión de las venas retinianas es un bloqueo de las venas que transportan la sangre desde la retina. La retina es la capa de tejido en la parte posterior del ojo interno que convierte las imágenes de luz en señales nerviosas y las envía al cerebro. La alteración de los vasos sanguíneos en la retina a menudo produce visión borrosa.
Causas, incidencias y factores de riesgo
La oclusión de las venas retinianas es causada con mayor frecuencia por el endurecimiento de las arterias (aterosclerosis) y la formación de un coágulo de sangre. La obstrucción de venas más pequeñas (oclusión de la rama de la vena retiniana u OVBR) en la retina a menudo ocurre cuando las arterias retinianas que han sido engrosadas o endurecidas por la aterosclerosis se cruzan y ejercen presión sobre una vena retiniana. En la oclusión de la vena central de la retina (OVCR), se presume que se forma un coágulo en el vaso principal que drena sangre de toda la retina.
Los factores de riesgo para la oclusión de las venas retinianas incluyen:
- Aterosclerosis
- Diabetes
- Presión arterial alta (hipertensión)
- Otras afecciones oculares, como glaucoma, edema macular o hemorragia vitrea.
Debido a que el riesgo de estos trastornos aumenta con la edad, la oclusión de las venas de la retina afecta con mayor frecuencia a las personas mayores.
La obstrucción de las venas de la retina pueden causar otros problemas oculares, incluyendo:
- Glaucoma (presión alta en las arterias), causado por vasos sanguíneos nuevos y anormales que crecen en la parte frontal del ojo.
- Edema macular, causado por la pérdida del líquido en la retina.
Síntomas
- Nublado repentino o pérdida de la visión en todo o parte de un ojo.
Signos y pruebas
Para evaluar la oclusión de una vena retiniana, el oftalmólogo necesitará dilatar las pupilas para examinar la retina. Otros exámenes que también se pueden realizar son la fotografía de la retina, la angiografía con fluoresceína y la tomografía de coherencia ocular.
Además de los exámenes oculares especiales, otras pruebas pueden incluir:
- Exámenes de sangre para detectar diabetes, colesterol alto y niveles de triglicéridos.
- Exámenes de sangre para buscar un problema de coagulación o engrosamiento de la sangre (hiperviscosidad), particularmente en pacientes jóvenes.
El oftalmólogo vigilará de cerca cualquier bloqueo durante varios meses. Muchos efectos dañinos, como el glaucoma, pueden tardar 3 o más meses en desarrollarse después de la oclusión.
Tratamiento
Muchas personas recuperan la visión, incluso sin tratamiento. Sin embargo, la visión rara vez regresa a la normalidad. Es posible que necesite tratamiento para evitar que se forme otra obstrucción en el mismo o en el otro ojo. Es importante controlar la diabetes, la presión arterial alta y los niveles altos de colesterol. A ciertos pacientes se les puede prescribir aspirina u otros anticoagulantes.
El tratamiento para las complicaciones de la oclusión de las venas de la retina pueden incluir:
- Tratamiento con láser focal, si existe edema macular.
- Inyecciones de medicamentos contra el factor de crecimiento endotelial vascular (anti-VEGF) en el ojo. Estos tratamientos incluyendo Lucentis®, pueden bloquear el crecimiento de nuevos vasos sanguíneos que pueden causar glaucoma y reducir el edema macular.
- Inyección con corticosteroides o fromulaciones biológicas que contienen esteroides en el ojo.
- Tratamiento con láser para prevenir el crecimiento de vasos sanguíneos nuevos y anormales que llevan al glaucoma.
Pronostico
El pronóstico varía. Algunos pacientes con oclusión de las venas retinianas recuperan una visión útil, mientras que otros pueden no hacerlo a pesar del tratamiento. Es importante manejar adecuadamente las complicaciones, como el edema macular y el glaucoma. Sin embargo, tener cualquiera de estas complicaciones es más probable que conduzca a un mal resultado.
Complicaciones
- Glaucoma
- Pérdida parcial o total de la visión en el ojo afectado
La oclusión de la vena retiniana es un signo de una enfermedad vascular general. Las mismas medidas utilizadas para prevenir otras enfermedades de los vasos sanguíneos, como la enfermedad de las arterias coronarias, pueden disminuir el riesgo de oclusión de las venas de la retina.
Estas medidas incluyen:
- Consumir una dieta baja en grasas
- Hacer ejercicio regularmente
- Mantener un peso ideal
- No fumar
La aspirina u otros anticoagulantes pueden ayudar a prevenir obstrucciones en el otro ojo. El control de la diabetes es importante en general y también puede ser útil para prevenir la oclusión de las venas de la retina.